Las regiones pertenecientes al sur de Italia cuentan todas con una indeleble marca de Federico II, uno de los más importantes e influyentes hombres de la Europa medieval, quien durante su imperio dejó como legado gran cantidad de castillos, sobre todo en la parte sur de Italia, como en Sicilia.
Castillos del sur de Italia
Castillo de Bari
El Castillo de Bari fue renovado y convertido en fortaleza por Federico II. Durante los siglos XV y XVI este castillo fue la residencia de la princesa de Nápoles Isabella de Aragón y su hija Bona Sforza, quien sería la futura reina de Polonia.
Castel del Monte
El castillo se ubica en la región de Apulia, es el más destacado por su peculiar diseño octogonal que acoge influencias góticas y árabes para su decoración.
Se construyó en 1240 por Federico II, actualmente fue restaurado por completo y declarado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Castel dell’Ovo
El Castel dell’Ovo (Castillo del Huevo), que se ubica en la bahía de Nápoles, es una impresionante edificación en cuanto a diseño y arquitectura. Además posee una leyenda peculiar.
La leyenda cuenta que Virgilo escondió un huevo en una de las cámaras secretas del castillo, y mientras el huevo se mantuviera intacto, la ciudad de Nápoles se encontraría a salvo.
El castillo fue construído sobre las ruinas de una antigua fortaleza y prisión romana que albergó al último emperador romano de Occidente en el año 476.
Actualmente se encuentra en un buen estado, debido a las constantes remodelaciones, cuidados y ampliaciones que se le han efectuado después de tantos siglos de bombardeos y ataques. Por ello, sólo determinadas áreas están expuestas al público.
Castel Nuovo
El Castillo Nuevo o conocido también como Maschio Angioino es una edificación levantada por el rey Carlos de Anjou.
Posee detalles propios de la arquitectura del siglo XIII y cinco torres redondas como parte de la defensa del castillo. Además, por los fluctuantes cambios de mando entre los Aragón y los Borbones, el castillo fue adoptando características de ambos.
Castillo Sant’Elmo
El Castillo Sant’Elmo fue construido sobre la colina de Vomero, también por el rey Carlos de Anjou. En su arquitectura destaca una estrella de seis puntas.
Su edificación tenía la intención de ser dedicada a San Erasmo, luego el nombre fue evolucionando a San Ermo y, finalmente, a San Elmo.
Anteriormente, fue utilizado como residencia, más tarde como prisión y en la actualidad alberga un interesante museo.